Del budare a la mesa

 Nuestra primera parada.

“Aquí en Chirimena se encuentra una MARAQUITA y para poder disfrutarla compre su guarapita"Así nos recibe este hermoso pueblo mirandino lleno de muchos sabores y alegría de parte de sus habitantes.

A tan solo 131 km de Caracas se encuentra chirimena. Un pueblo que antes era poco conocido hoy en día es una parada turística para quienes buscan relajarse frente al mar, tomar el sol y disfrutar de la comida. Aquí podemos encontrar buenas posadas para el alojamiento de los turistas con muchas comodidades. La alegría y solidaridad con la que nos reciben es muy agradable, nos hacen sentir como en casa.

La playa del pueblo, Chirere, Corrales, Caimanes y Majagua son las playas preferidas. En esta semana santa la seguridad estuvo muy organizada, en todas las playas habían bomberos y guardavidas para cualquier eventualidad y para controlar a las personas. La limpieza estuvo muy aceptable salvo por algunos temporadistas.

Llegué el jueves santo y era increíble ver como el pueblo estaba lleno de gente esperando por sus empanadas. “Me da dos de cazón, una de guacuco y tres de queso por favor"Ver la agilidad con la que atendían a esas personas con personas sin perder el control me sacaba una sonrisa. Los pescadores vendiendo la pesca del día, absolutamente grandioso.

Tuve la oportunidad de conversar con la señora Ramona conocida por sus empanadas,  las mejores del pueblo,  me dicen desde hace 11 años. Ella y sus hijas se levantan muy temprano todos los días (los de temporada) para abrir su negocio. El kiosko verde que se encuentra justo antes de subir a Chirere. Por lo que he escuchado durante todas mis visitas al pueblo el secreto de las empanadas es un toque de azúcar y según un poco de harina de trigo, no lo confirmé pero eso escuché.

Cuando llego al kiosko la señora Ramona se encontraba hablando por teléfono, haciendo un pedido por lo que alcance a escuchar. Pedía que le despacharan carne queso y si no escuché mal, calamar. Ella nos cuenta que sus días de semana son tranquilos, los aprovechan para hacer sus quehaceres, la gente del pueblo trabaja en sus ventas, los maestros dando clases. Los fines de semanas dependen si hay fiesta o algún puente. Los sábados suelen ser movidos.

Nos cuenta que cuando es temporada si hay que trabajar a toda máquina, ya a las 6:30 am están empezando con las preparaciones de las empanadas y por lo  general dejan sus guisos preparados desde el día anterior. Ya es una rutina de llegar y empezar a sacar empanada tras empanada sin perder el ritmo. ¿Saben que es increíble? Que en un día fuerte pueden gastar hasta una paca de harina pan, mucha masa que amasar. Pero para ella es algo normal.

Una pregunta que tenía pensado hacerla desde que entre al pueblo era que me dijera lo que piensa que le hace falta al pueblo. Justo en el momento en que le hice la pregunta cambió su tono de voz y su expresión. Me dice que al pueblo le hacen falta muchas cosas, que está muy abandonado. Más limpieza, seguridad y respeto de los turistas. Ella sabe que en el pueblo viven del turismo pero hay muchos turistas que le hacen daño al pueblo y es su deber reclamarles si están haciendo algo indebido.

Para conseguir los insumos es algo complicado, tiene la ventaja de que la harina si se la distribuyen con regularidad. Pero el precio en el que consigue la proteína es algo exagerado. Tiene que ir hasta Higuerote para conseguir todo lo que necesitan ya que en el pueblo es difícil conseguir.

La señora Ramona los invita a que visiten el pueblo y que se porten bien para que los atiendan con cariño, respeto y mucha cordialidad para que se sientan bien y vuelvan a ir al pueblo. "Porque si a uno lo tratan mal en una parte uno no vuelve, por eso es que hay que tratarlos bien para que regresen"

De verdad que Chirimena nunca me ha dejado mal. Sus playas son hermosas, su gente excepcional y su gastronomía muy divina. Les quiero pedir si la llegan a visitar algún día que respeten a la gente del pueblo, recuerden que somos nosotros los que estamos entrando a su casa. Y colaboren con la limpieza del pueblo. No hay nada más lindo que entrar a este pueblo y verlo limpio. Recuerden que si queremos una mejor Venezuela todos debemos colaborar, así sea con el más mínimo detalle.

Espero que les haya gustado nuestra primera parada y cuando tenga la oportunidad de volver a ir hablaremos con más de estos héroes de la cocina. Esperen nuestro próxima parada de esta guía que esperamos anunciar la semana que viene. Nuestros mejores deseos y ¡Buen provecho!