¡Un reto hasta los huesos!

El pasado domingo 15 de marzo me aventuré a una odisea que nunca pensé que llegaría a ser tan interesante. Se llevo a cabo en el centro comercial "Los aviadores" del estado Aragua un reto de comida, pero no de cocinar si no tragar y tragar. Este evento fue idea del equipo tan creativo como entusiasmado de la cadena de alimentos "Pollo Cool".

El reto era sencillo de entender, pero nada fácil de digerir. Debía comer una hamburguesa de pollo, un cuadril de pollo, dos alitas picantes, un tender, dos deditos de maíz, una ensalada de repollo, dos yukitos (mini yucas), una pepsi grande y 12 choco-yukos (Yuka con  chocolate). Todo eso en 8 minutos, si, mucha comida y poco tiempo. Y la ronda final que eran 10 alitas extra picantes. Y el ganador recibía un premio en metálico y un trofeo.

En lo que me enteré del reto decidí enviar mi solicitud, igual no perdía nada con probar. Después de responder algunas preguntas y explicar porque podía ganar el reto me llegó respuesta, había sido seleccionado para participar en el primer "Reto Cool", Volví a pensar, bueno ya quedé, puedo participar no pierdo nada con intentarlo. Al final de esa tarde ya estaban seleccionados los 10 glotones que participaríamos en el reto.

Llegó el gran día, sólo había desayunado un par de mini pizzas, queso y un jugo de lechoza. Llegamos a donde se realizaría el evento y voy a anotarme para que me dieran las reglas y firmar unos papeles. En ese momento es que me doy cuenta en lo que me había metido, los otros participantes eran mucho más grandes que yo. Cabe destacar que sólo tengo 18 años y soy flaco. Las pocas esperanzas que tenía de ganar se fueron cuando vi a los otros concursantes. Me dieron una franela y a esperar que empezara el reto. Estaba tan nervioso que me temblaban las manos y no dejaba de sonreír. Nos llaman uno a uno para presentarnos ante el público y preguntarnos cual era nuestro mayor acto de glotonería. "Una pizza grande, una hamburguesa doble y un batido" "Dos pizzas familiares y dos refrescos grandes" Cantidades absurdas de comida decían los participantes. Allí hablé conmigo mismo y me dije "aquí lo que importa es la rapidez así que para adelante". 

"3...2...1... POLLO COOL DELICIOSO HASTA LOS HUESO!" Fue lo que dio inicio a la comedera. Empecé por la hamburguesa, creo que la terminé como en un minuto y medio. Luego pasé al cuadril de pollo en el cual si me tarde un poco porque debía dejarlo sin carne. Me comí los deditos de maíz super rápido para empezar con el tender el cual estaba muy seco por ser pechuga de pollo, me comí las dos yukitas. Me tragué, porque no hay otra definición, la pepsi en tan solo unos segundos y pasé a comerme los 12 choco-Yuko. Faltando tan solo tres segundos, logré terminar de comerme todo. Jamás pensé que lo lograría.

Después de un ENO, felicitaciones, algunas fotos y medio hacer la digestión ya me tocaba la segunda ronda. El otro participante se comió todo en 7:30. Me asusté para ser sincero.

Empezó la segunda ronda y me decidí comer sin ver a nadie, calmado porque no era por tiempo, pero tampoco lento para no perder. El picor de las alitas picantes me llegó cuando iba por la tercera. Debía seguir comiendo, pero para mi sorpresa el otro concursante, Héctor, vomitó. Yo todavía no reaccionaba, iba por mi sexta alita cuando el quedó descalificado. Mucha alegría sentí cuando reacciono y me doy cuenta de que gané el reto.

De verdad que el reto estuvo muy divertido, la propaganda que le hicieron me gustó bastante. Lo único que sugiero es tratar de entretener un poco más al público. En abril se viene el segundo reto y estaré allí participando otra vez, veamos que pasa jajaja. Los invito a que vayan y prueben su comida. Si quieren comentar algo no hay ningún problema, es gratis, saludos y ¡Buen provecho!

Junto al increíble equipo de Pollo Cool

Imágenes cortesía de "PolloCool"